Canis lupus familiaris
- Origen: Marruecos
- Tipo: Pincher
- Tamaño: Grande
- Peso: 33 a 45 KG
El Aïdi o Perro de Montaña del Atlas es una de las razas caninas más antiguas del mundo, originaria del norte de África. Debido a su larga y rica historia, este perro es célebre por su valentía y ferocidad. Estos perros, delgados y musculosos, son conocidos por defender sus zonas de pastoreo en las montañas del Atlas de los más feroces depredadores. Si quiere saber todo lo que hay que saber sobre el Aïdi, sus cuidados y posibles problemas de salud, siga leyendo este artículo para que te sorprendas de esta hermosa raza de perros Aïdi.
Orígenes de la raza de perro Aïdi
El Aïdi es una raza canina originaria del norte de África, concretamente de Marruecos. Estos caninos han practicado tradicionalmente labores de pastoreo entre los rebaños patrimoniales a los campesinos del norte del Atlas, entre los que es popular desde hace cientos de años, siendo una raza realmente antigua, con una larga historia en su región de origen. Sin embargo, sus funciones como pastor difieren mucho de las de otras razas de pastores del resto del mundo, pues lejos de guiar los rebaños, el aïdi se encarga de protegerlos ferozmente de posibles depredadores. Esta es una tarea que el aïdi se toma muy en serio, y es conocido por ser extremadamente protector de sus rebaños. También son perros muy inteligentes y aprenden rápidamente lo que sus amos necesitan que hagan. El aïdi es una raza leal y devota, y es un gran compañero para los que viven en zonas rurales. También es una raza muy sana, y puede vivir muchos años con los cuidados adecuados. Si busca un perro que sea un amigo leal y protector, el aïdi es la raza que necesita.
Características de la raza de perros Aïdi
El Perro de Montaña del Atlas es un perro de tamaño grande, con una altura de 52-62 centímetros y un peso de 33-45 kilogramos, según el estándar oficial de la raza. La esperanza de vida media de esta raza es de 12-14 años. Su cuerpo es rústico y musculoso, pero, sin embargo, parece ligero y equilibrado. Tiene una cabeza fina y claramente triangular. Destacan sus ojos oscuros y su nariz negra. Sus orejas son de tamaño medio y cuelgan hacia los lados, y sus puntas redondeadas son visibles. Su pelo es largo y áspero, con una capa más gruesa en el cuello, la garganta y la cola, así como en la cara y las orejas, que son un poco más cortas, finas y dispersas.
El Perro de raza Aïdi puede tener una gran variedad de colores de pelaje, como el blanco, el arenoso, el leonado, el rojizo, el atigrado, el blanco y negro, el blanco y el leonado, así como el tricolor. El patrón más común consiste en manchas dispuestas de forma que parezcan una manta tendida con un gorro, separadas por una banda que se hace más ancha a medida que se aleja de la cima. La nariz y los labios son negros.
Carácter de los Aïdi
La lealtad, el coraje y la docilidad del perro de montaña del Atlas son solo algunos de los rasgos que lo convierten en un orgulloso miembro de su familia. Estos perros son ferozmente leales a sus dueños, protegiéndolos contra cualquier peligro. También son intensamente cariñosos y dóciles, tanto con sus guardianes como con el resto de su familia. Como el aïdi trabaja duro como perro guardián, es leal, duro e intrépido. El aïdi es protector e intrépido, lo que los convierte en eficaces perros guardianes. Siempre están atentos y responden inmediatamente a las amenazas y los riesgos.
Dato curioso del Aïdi
El pasado de esta raza como perro guardián en un entorno rural tiene varias implicaciones. En primer lugar, si tenemos un aïdi en casa, debe tener un espacio amplio y abierto para correr y jugar a su antojo, ya que son perros extremadamente activos que requieren un ejercicio importante cada día. Necesitan estar activos mental y físicamente, por lo que los juguetes o diversiones para mantenerlos ocupados son una buena idea. En segundo lugar, puede resultarles difícil adaptarse a la vida urbana, especialmente en apartamentos o pisos, aunque sean grandes. Esto se debe a que sus necesidades de ejercicio son elevadas. Tampoco es aconsejable que estén en casas sin amplias zonas exteriores o patios traseros durante largos periodos de tiempo, los volverá destructivos.
Salud de la raza Aïdi
Una gran parte de los perros de raza Aïdi sufren diversos problemas de salud, a pesar de su estado de salud general. Algunos de los problemas más comunes asociados a las razas grandes y gigantes son la displasia de cadera, la displasia de codo, la displasia rotuliana y la torsión de estómago, entre otros. Además, hay que revisar con frecuencia sus orejas, ya que son susceptibles de infectarse con hongos porque tienden a retener la humedad, lo que permite la proliferación de microorganismos dañinos. Las visitas al veterinario no deben descuidarse, y deben realizarse de forma regular para mantener a nuestros perros protegidos de diversas enfermedades. Por ello, nuestros perros deben ser vacunados y desparasitados.
¿Cómo adoptar un Aïdi?
El aïdi no es muy común en Europa, Asia, América y Oceanía, excepto en Marruecos o el norte de África. Por lo tanto, adoptar un aïdi para que se convierta en un miembro de nuestra familia puede ser un poco difícil. No debemos renunciar antes de intentarlo, por lo que podemos preguntar a los refugios y asociaciones de animales de nuestra localidad si tienen algún perro que se ajuste a nuestros requisitos. Si no es así en ese momento, tal vez queramos esperar o ampliar nuestra búsqueda a lugares menos cercanos.
En resumen
Los perros de raza aïdi son conocidos por su vigilancia y obediencia, así como por su afán de rendimiento. Como aprenden rápido, son valorados como perros de trabajo, especialmente porque poseen atributos ejemplares como la obediencia, la lealtad, la vigilancia y la territorialidad. Los perros aïdi son una de las razas más receptivas al aprendizaje, y son capaces de dominar tareas realmente desafiantes con poco esfuerzo. El aïdi es un perro tranquilo y equilibrado, pero puede volverse obstinado en su entorno familiar. Sin embargo, hay que tener en cuenta algunos elementos clave para la educación y los hábitos de vida saludables, y no hay problemas si los seguimos. Como todos los perros, el aïdi responde bien al adiestramiento. El refuerzo positivo es un componente vital del proceso de adiestramiento. Es fundamental evitar los castigos, la violencia y los gritos con el aïdi, así como con cualquier otro perro, ya que solo generan miedo, ansiedad, tensión y estrés.